Las cosas cambian.

¿Porque lo había hecho?
No lo entendía. Por más que pensaba en ello, menos claro lo tenía.
Se sentía como una estupida por haber dado tanto y haberse quedado con las manos vacías. Se quedaba todas las noches mirando su sonrisa en aquella foto que el decía que no salía nada favorecedor, al final Nora le convenció asegurándole que era perfecto, aunque el siempre decía que esa perfección se debía a que ella estaba con el.
Recordaba detalles que en otros tiempos fueron insignificantes pero que ahora eran la causa de su llanto, aquel que ya no tenía más lágrimas que derramar.
Decía que era su vida, ahora eso se quedaba en el aire. Ya nada importaba, el no estaba.
Pero Nora no quería olvidarle, no ahora, si fuese posible, nunca.
Todas las personas suelen decir ‘’siempre’’, Nora pesaba que aquello era tan grave que ella procuraba no hacerlo. No se puede prometer algo que puede romperse con tanta facilidad. Aquello era la prueba, el también prometió la eternidad, pero hoy ya no estaba cumpliendo aquello.
El volvió a sonreír por ella, pero jugo tantas veces con los sentimientos de Nora, que todo acabo. La juro tantas verdades que eran mentiras…A veces se preguntaba si alguna vez la dijo alguna realidad…A pesar de todo, le extrañaba, le necesitaba, le necesitaba como si fuese el aire, de hecho el siempre fue el aire que ella respiraba. Su cabeza no hacia mas que pensar en un…nosotros.
En su piel quedaba tatuada esa fecha que apunto tantisimas veces para tenerle mas presente, en sus recuerdos quedo cada caricia, cada beso… recordaría cada mensaje diciéndola que se quedaría esperándola toda la noche, que era lo mas importante…
No podía mas, sentía que se moría sin su oxigeno, sin su Eric.
Hecho la cara sobre la almohada y chillo con todas sus fuerzas sin parar, rememorando su imagen, su alegría al verla, y lloro. Lloro sin cesar, pidiendo que volviese, que regresase junto a ella.
Ojala todo fuese como aquella tarde del 18.